ANTES Y DESPUÉS ı BODA EN LA CASONA DEL JUDÍO
Siempre es especial hacer un video de boda en la Casona del Judío y es que es al primer sitio que fui a hacer una boda como asistente del fotógrafo Michel Quijorna allá por el 2012 y al que siempre estaré agradecido por abrirme las puertas de su estudio de par en par.
Cuando comencé a hacer video de boda en Cantabria siempre tuve muy claro hacia donde quería encaminar mi trabajo. No quería limitarme solo a mostrar imágenes bonitas del día de la boda, quería ir más allá. Al fin y al cabo, el día de la boda es el culmen a una historia de dos personas que, a lo largo de un tiempo, han ido conociéndose, viviendo experiencias, superando situaciones y, finalmente, deciden dar un paso más en su relación, celebrar con sus amigos y familiares el amor del uno por el otro y proclamarlo a los cuatro vientos.
Marisa y Pablo son de esas parejas que han pasado por ese camino, se conocieron, viajaron, superaron sus obstáculos y decidieron que su vida había cambiado desde que estaban juntos y que querían que fuese así para siempre. Se rodearon de amigos venidos de muchas partes del mundo, pero los orígenes escoceses de Marisa fueron los predominantes así familiares, de todos los que, de una manera u otra, están vinculados a ellos. Así pues, podemos decir que se trató de una boda Escocesa en Cantabria. Los kilt de los invitados y padrino y el detalle del chaleco de Pablo confeccionado con el cuadro de la familia Fraser fue todo un éxito. Además, como no podía ser de otra forma, a falta de Castillo, eligieron el precioso Palacio de la Magdalena para celebrar su ceremonia para posteriormente acudir a la Casona para el banquete y la fiesta. Un bonito día que, sin duda, recordarán para siempre ellos y sus invitados porque sin duda hubo un antes y un después.
